Estrategias para enfrentar la enfermedad a fin de mejorar la salud mental

Controlar la salud mental y el bienestar emocional es tan importante como tratar los síntomas físicos de la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa.


Combatir los problemas de salud mental puede hacer que sea más difícil ocuparse del manejo de su enfermedad, ir al trabajo o a la escuela, o participar en relaciones con su familia y amigos. El estrés de sentirse mal emocionalmente también puede afectar su salud física.

Queremos ayudarlo a sentirse mejor. Existen varias estrategias para enfrentar la enfermedad que pueden ayudarlo a sentir que tiene más control y a ser optimista sobre su capacidad para manejar la EII.

Cómo abordar la EII un día a la vez

Cuando se siente deprimido por vivir con una enfermedad crónica, incluso levantarse de la cama puede ser difícil. Enfrentar el día puede ser agotador y abrumador.

  • Planifique algo especial que desee, incluso si es algo pequeño como mirar su programa de televisión favorito, comer su desayuno favorito, llamar a un amigo o dar una larga caminata en su descanso para almorzar.

  • Prepárese la noche anterior para el día siguiente a fin de eliminar todo el estrés posible por la mañana. Esto puede incluir preparar la ropa o empacar el almuerzo para el día siguiente.

  • Tómese el tiempo para ponerse su atuendo favorito, afeitarse o maquillarse. Hacer el esfuerzo por verse lo mejor posible lo ayudará a pensar en usted de forma más positiva y alentará a los demás a responder positivamente ante usted.

  • Haga planes para el día con anticipación. Es importante estructurar su día, independientemente de si tiene un brote o si está en remisión. Asegúrese de disponer de tiempo suficiente para su atención médica.

  • Programe tiempo para descansar. Es más fácil comenzar el día y realizar sus actividades si sabe que tiene un descanso incorporado.

  • Permítase un poco más de tiempo para comenzar la mañana. Leer o escuchar música puede hacer que sea más fácil comenzar el día.

Si todavía tiene problemas para levantarse de la cama después de varias semanas, es posible que necesite ayuda profesional para tratar su depresión.

Tratamiento psicológico

No existe un enfoque universal para el tratamiento de salud mental para pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal (EII). Hay diversas formas de tratamiento que son útiles para los pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal y están respaldadas por investigaciones científicas en curso.

Terapia cognitivo-conductual

Durante la terapia cognitivo-conductual (TCC), los pacientes trabajan con un terapeuta para identificar y cambiar los patrones de pensamiento negativos y los comportamientos que contribuyen a la depresión y la ansiedad. Este tratamiento basado en la evidencia ha demostrado mejorar la calidad de vida de los pacientes.

Hipnoterapia dirigida al intestino

Este tratamiento utiliza ejercicios de relajación profunda, como meditación e imágenes guiadas, para enseñarles a los pacientes cómo sentir que tienen más control de sus síntomas. Los pacientes con EII que usan hipnoterapia dirigida al intestino han mostrado resultados positivos en estudios de investigación, como períodos de remisión más prolongados y reducción de la inflamación en todo el cuerpo.

Terapia basada en la atención plena

Esta intervención basada en la evidencia, que incluye meditación, ha demostrado ayudar a mejorar la depresión, la ansiedad y la calidad de vida en general.

Medicamentos

Pueden usarse medicamentos en algunos pacientes que experimentan síntomas graves de depresión y para el manejo del dolor crónico. Su médico puede recomendarle medicamentos, como antidepresivos o ansiolíticos. Estos medicamentos también pueden recetarse además de otras formas de tratamiento de salud mental. Es posible que su gastroenterólogo se sienta cómodo recetando este medicamento o que lo derive para una consulta con un psiquiatra para recibir tratamiento. Como con cualquier medicamento para tratar su enfermedad, siempre debe analizar los riesgos y efectos secundarios con su médico y profesional de salud mental.

Técnicas de reducción del estrés

El estrés y la ansiedad no causan enfermedad de Crohn ni colitis ulcerosa, pero pueden afectar negativamente su salud física y causar más malestar gástrico. Estas técnicas de atención plena pueden ayudarlo a aprender a relajarse.

Respiración diafragmática

La capacidad de relajarse y despejar la mente es una habilidad útil para sobrellevar el estrés. Vivir con una enfermedad crónica puede hacer que sea difícil saber cómo relajarse o incluso dónde comenzar. La respiración diafragmática, también conocida como respiración profunda o respiración abdominal, ofrece muchos beneficios físicos y emocionales, lo que la convierte en un excelente punto de partida.

  • Disminuye la frecuencia cardíaca y la presión arterial

  • Disminuye la tensión muscular

  • Oxigena la sangre

  • Calienta las manos y los pies

  • Aumenta la energía y la motivación

  • Mejora la concentración

  • Fortalece el sistema inmunitario

  • Reduce las hormonas del estrés

La activación del diafragma a través de la respiración diafragmática también masajea suavemente los órganos internos, incluidos los intestinos y el estómago, lo que puede ayudar con el dolor abdominal, la urgencia, la hinchazón y el estreñimiento.

Cómo realizar la respiración diafragmática

La respiración diafragmática es una habilidad que requiere práctica. Se vuelve más fácil con el tiempo. Cuando está aprendiendo a realizar la respiración diafragmática por primera vez, es posible que sienta cierta incomodidad o aturdimiento, lo cual es perfectamente normal. Dese tiempo para aclimatarse después de su sesión y tenga cuidado de no ponerse de pie demasiado rápido.

  1. Siéntese o acuéstese en un lugar cómodo. Cierre los ojos.

  2. Colóquese una mano en el pecho y otra en el abdomen. La mano de abajo debe moverse. La mano de arriba debe permanecer quieta o solo moverse a medida que se mueve la mano de abajo.

  3. Inhale por la nariz durante unos 4 segundos y sienta cómo se expande el abdomen. Es posible que sienta una ligera tensión durante estas inhalaciones iniciales.

  4. Mantenga la respiración durante 2 segundos.

  5. Exhale por la boca muy lentamente durante unos 6 segundos. Debe tener la boca relajada y la exhalación debe ser lenta y constante.

  6. Repita durante 5 a 15 minutos.

Relajación muscular progresiva

Esta técnica, también llamada RMP, implica tensar y relajar varios grupos musculares para aliviar la tensión adicional del cuerpo que puede empeorar el estrés y el dolor. Es fácil de aprender y lo ayudará a ser más consciente de la relajación muscular después de liberar la tensión en cada grupo de músculos. Esta técnica también puede realizarse en consulta con un profesional de salud mental.

Con cada movimiento, concéntrese en las sensaciones de relajación que invaden su cuerpo. Puede sentir calidez y una sensación de bienestar y paz. Mantenga cada posición durante 7 a 10 segundos, luego relaje los músculos durante unos 20 segundos. Tense y relaje cada grupo muscular dos veces antes de pasar a la siguiente parte del cuerpo.

  1. Comience sentado o recostado en una posición cómoda. Es posible que desee cerrar los ojos.

  2. Comience con los músculos de ambas manos. Cierre los puños y mantenga firmemente durante 7 a 10 segundos. Luego, suelte y relaje los músculos durante unos 20 segundos. Observe cómo se sienten sus manos a medida que liberan tensión. Puede comenzar a notar una sensación de calidez. Repita esto una vez más.

  3. A continuación, tense los músculos de la parte superior e inferior de los brazos flexionando los brazos a la altura del codo y tensándolos a medida que los flexiona. Luego, relaje esos músculos.

  4. Después, concéntrese en los músculos de los hombros y el cuello. Encoja los hombros hacia las orejas. Observe la calidez, la pesadez y la relajación que invaden los músculos de los hombros y el cuello. Luego, suelte.

  5. Ahora, presione la cabeza contra la superficie sobre la que esté apoyada. Tense suavemente los músculos del cuello y luego suelte.

  6. A continuación, lleve suavemente el mentón hacia el pecho. Note la sensación de tensión. Suelte.

  7. Ahora se enfocará en los músculos del rostro. Arrugue los músculos de la frente y el área alrededor de los ojos. Note la sensación de tensión en estos músculos y luego suelte.

  8. Ahora, pase al pecho. Arquee la espalda lenta y cómodamente mientras inhala y tense los músculos alrededor de la caja torácica. Mantenga la tensión y luego suelte.

  9. Tense los músculos de la parte inferior de la espalda y el estómago presionando los glúteos contra la silla, el piso o la cama. Sienta la tensión y note la rigidez en la parte baja de la espalda, el estómago y los glúteos. Luego, relájese.

  10. Ahora, levante la pierna derecha y apunte los dedos de los pies hacia arriba y ligeramente hacia adentro. Observe la tensión que va desde la parte superior de la pierna hacia abajo y pasa por la rodilla, la pantorrilla y los dedos de los pies. Luego suelte.

  11. Levante la pierna izquierda y apunte los dedos de los pies hacia arriba y ligeramente hacia adentro. Sienta la tensión pasar por los músculos de las piernas hasta llegar a los dedos de los pies. Observe la calidez que fluyó hacia estos músculos y luego relaje la pierna.

  12. Finalmente, haga una revisión de todo el cuerpo de la cabeza a los pies. Observe cómo se ha relajado su cuerpo. ¿Qué músculos se han relajado? Simplemente observe la diferencia entre cómo se siente su cuerpo ahora y cómo se sentía antes de comenzar.

Puede volver a ciertas áreas del cuerpo o simplemente disfrutar de la relajación y sentirse orgulloso de usted mismo por hacer algo bueno por su cuerpo y su mente.